Ayudar a preservar especies en peligro de extinción no sólo está al alcance de grandes organizaciones o centros de conservación como Bioparc Fuengirola, sino también al de todos y cada uno de nosotros.
Contribuir a la conservación de especies amenazadas puede ir desde la reproducción controlada que se realiza en zoológicos y la reintroducción de estas en sus hábitats naturales, pasando por trabajos de conservación ‘in situ’, hasta acciones individuales en el día a día de cada persona como reciclar, reducir el consumo de ciertos productos o proteger espacios naturales cercanos. Para contribuir en este último punto es bueno seguir los siguientes pasos:
- Aprender sobre las especies en peligro de extinción que pueden habitar en tu entorno local, y enseñar a familiares y amigos sobre la importancia de esa flora y fauna. Estas acciones pueden considerarse como un primer paso para proteger a especies amenazadas.
- Crear un hogar amigable con la naturaleza reduciendo el consumo de agua, dejando de consumir productos químicos, como por ejemplo de limpieza o aseo personal, que puedan ser dañinos para el medioambiente. El uso de pesticidas en el jardín o el interior de los hogares también causa daños. Pueden encontrarse formas alternativas de mantener estos espacios prósperos sin contaminar y sin tener un efecto negativo en la vida silvestre de su área.
- Reciclar y comprar productos reutilizables o reciclados. Un acto tan sencillo y fácil de hacer como reciclar puede contribuir a la disminución de la deforestación, uno de los procesos que encabezan las causas de la pérdida de hábitats naturales de los animales y que por lo tanto, pone en peligro la vida de estos en sus entorno. También es conveniente conocer las consecuencias que puede tener la elaboración cada producto; es posible que sorprenda acerca de cuáles provocan daños irreversibles a los ecosistemas.
- Apagar las luces. Cuanta más energía se utiliza, más contaminantes se depositan en el medio ambiente. Al limitar el consumo de energía, se limita la cantidad de contaminantes que las plantas de energía arrojan al medio ambiente. Puede parecer que una persona no puede marcar la diferencia, pero cuantas más lo hagan, mayor será el impacto de estas acciones.
- Participar en acciones de voluntariado en refugios de vida silvestre, parques o asistir a centros de conservación como Bioparc Fuengirola. En ellos, es posible conocer más a fondo sobre el trabajo necesario para preservar especies que ya se encuentran amenazadas y evitar que otras que no lo están se encuentren en la misma situación.
La mano del hombre, principal motivo de la desaparición de especies
La pérdida de biodiversidad y la desaparición de las especies se debe principalmente a la destrucción de sus ecosistemas. Los hábitos de consumo y el imparable crecimiento y expansión del ser humano aumentan la tala de las selvas, la contaminación del aire y el agua, la caza y pesca ilegal. Lo que antes eran problemas locales se ha convertido en un problema que afecta a todo el planeta con el calentamiento global.
El riesgo que representa el deterioro de la naturaleza hace que centros de conservación de animales como Bioparc Fuengirola, desarrollen casi toda su actividad focalizada en la concienciación para la protección y restauración de estos ecosistemas vitales para animales y plantas.
Diferentes estudios internacionales estiman que el número de especies en peligro de extinción se multiplica año a año. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) tiene en su Lista Roja de Especies Amenazadas más de 40.000 especies, mientras la Plataforma Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios de Ecosistemas (IPBES), señala que alrededor de un millón de especies de animales y plantas se encuentran en esta crítica situación y bajo el riesgo de desaparecer en unas décadas.