En un paso más hacia la conservación de especies amenazadas, Bioparc Fuengirola ha asumido el reto de trasladar desde el zoológico de Honolulu en Hawái a España a nueve varanos cocodrilo (Varanus salvadorii), una especie fascinante y extremadamente difícil de reproducir en centros de conservación. Estos reptiles, conocidos por su agilidad, hermosa coloración de su piel y largas colas que pueden alcanzar hasta el doble de su cuerpo, han llegado al parque andaluz con un objetivo crucial: formar parte del Programa Europeo de Especies en Peligro (EEP), que busca garantizar su conservación a través de una reproducción controlada en zoológicos europeos.
Este traslado no solo demuestra el compromiso de Bioparc Fuengirola con la protección de especies únicas, sino también su capacidad para liderar complejas operaciones internacionales. La logística detrás de este tipo de movimientos es extraordinaria, ya que los varanos cocodrilo requieren condiciones estrictamente controladas durante el viaje para garantizar su bienestar durante tan largo trayecto.
Una vez en Bioparc Fuengirola, estos nueve ejemplares se someterán a un proceso de adaptación antes de ser distribuidos a otros zoológicos europeos que participan en el programa de conservación. Este esfuerzo conjunto busca aumentar el conocimiento sobre la biología y las necesidades de la especie, mientras se contribuye a su reproducción en cautividad.
Para el programa europeo de reproducción de especies amenazadas (EEP), la llegada de estos jóvenes supone una importante revitalización genética en las poblaciones de los zoológicos europeos, ya que esta especie se reproduce muy poco en estos parques, y estos jóvenes están destinados a contribuir a la mejora de la variabilidad genética de la especie.
El traslado ha sido bastante complejo por los necesarios permisos de movimiento de animales, siempre bajo la supervisión de las autoridades CITES, y por la logística, también compleja, de organizar el viaje de los varanos para que pasaran el menor tiempo posible viajando, y en las condiciones óptimas de temperatura y humedad que la especie requiere en todo momento.
Los varanos cocodrilo son originarios de Nueva Guinea y destacan por su singularidad dentro del reino animal. Su presencia en el programa europeo no solo es una oportunidad para proteger la especie, sino también para sensibilizar al público sobre la importancia de conservar a estos increíbles reptiles, cuya supervivencia está amenazada por la destrucción de su hábitat natural y el comercio ilegal.
Con esta iniciativa, Bioparc Fuengirola reafirma su papel como referente en la conservación global y en la lucha por preservar la biodiversidad de nuestro planeta.
El varano cocodrilo, un tesoro en peligro: curiosidades y la lucha por su conservación
Originario de los ecosistemas tropicales del Sudeste Asiático, este majestuoso lagarto puede alcanzar hasta tres metros de longitud, lo que lo convierte en uno de los varanos más grandes, después del emblemático dragón de Komodo. Su nombre se debe a su aspecto imponente y a su piel escamada que recuerda al de los cocodrilos.
Entre las curiosidades más destacadas de esta especie está su capacidad para nadar largas distancias gracias a su poderosa cola, que utilizan como timón, y su gran capacidad para trepar, ya que son muy arborícolas durante toda su vida, lo que obliga a un diseño específico de las instalaciones para la especie. Para su óptimo alojamiento necesitan recintos con agua y con gran cantidad de árboles o ramas que les permitan desarrollar todo su potencial trepador. Además, el varano cocodrilo es un depredador oportunista, alimentándose de peces, aves y pequeños mamíferos, desempeñando un papel crucial en el equilibrio de los ecosistemas donde habita.
Sin embargo, el varano cocodrilo enfrenta serias amenazas en su medio natural. La pérdida de hábitat debido a la deforestación y la urbanización, junto con la caza furtiva por su carne y su piel, han reducido drásticamente sus poblaciones en muchas regiones. Este reptil también es víctima del tráfico ilegal de especies, un mercado negro que continúa poniendo en riesgo la supervivencia de animales como este.
Parques de conservación de animales como Bioparc Fuengirola desempeñan un papel vital en la protección del varano cocodrilo y otras especies amenazadas. A través de programas de conservación coordinados por la Asociación Europea de Zoológicos y Acuarios (EAZA), se promueve la reproducción controlada y la investigación sobre las necesidades biológicas y ecológicas de estos animales. Este trabajo es fundamental no solo para garantizar la supervivencia de la especie, sino también para sensibilizar al público sobre la importancia de proteger los ecosistemas tropicales.