Bioparc Fuengirola celebra un hito en la conservación de especies amenazadas con la selección de una hembra de faisán vietnamita (Lophura edwardsi) nacida en sus instalaciones para formar parte del grupo de ejemplares que será reintroducido en su hábitat natural en Vietnam. Esta acción se enmarca en el Programa Europeo de Especies Amenazadas (EEP) de la Asociación Europea de Zoos y Acuarios (EAZA), reafirmando el compromiso de los zoológicos modernos con la conservación de la biodiversidad.
El faisán de Edwards, una especie endémica de Vietnam, fue declarado extinto en la naturaleza hace casi veinte años. Gracias a los esfuerzos de conservación y reproducción en centros especializados como BIOPARC Fuengirola, se ha logrado mantener una población viable en centros de conservación que ahora podrá contribuir a la restauración de la especie en su ecosistema original.
“A través del programa de conservación de esta especie, se han seleccionado una serie de individuos pertenecientes a dicho EPP de la EAZA. Estos ejemplares realizarán un periodo de cuarentena en Tierpark Berlín y será este centro el encargado de su traslado a su hábitat de origen: Vietnam”, comenta Rosa Martínez, veterinaria en Bioparc Fuengirola.
Este logro subraya la relevancia de los zoológicos en la protección de especies en peligro crítico de extinción, garantizando no solo la supervivencia de estos animales, sino también su regreso a la naturaleza cuando las condiciones lo permitan. La participación de BIOPARC Fuengirola y la Fundación BIOPARC en este proyecto refuerza su compromiso con la conservación y su labor en programas internacionales de recuperación de especies.
“Esto es solo el inicio de un gran paso para esta especie. Lo sencillo, por decirlo de algún modo, ha sido su reproducción en nuestro parque y también lo será su traslado. Lo difícil, por el contrario, será que los individuos seleccionados para reproducirse en Vietnam produzcan una descendencia que sea capaz de sobrevivir a las distintas amenazadas que aún tienen en su medio natural y que provocaron su extinción. No se extinguen porque sean débiles, sino por la caza desmesurada de estas aves entre la población vietnamita. De hecho, los últimos ejemplares vistos de estos faisanes estaban en un mercado”.
El último ejemplar visto en libertad en Vietnam fue hace más de veinte años. El que en tanto tiempo no existan registros de un nuevo avistamiento en su hábitat natural ha llevado a catalogarla como una especie ‘Críticamente amenazada’ (CR), o ‘En Peligro Crítico’, una categoría reservada solo para las especies más amenazadas del mundo, si bien es cierto que, teniendo en cuenta los últimos datos de avistamiento en el medio natural, esta clasificación debiera de ser modificada a EW (Extint in the Wild), Extinto en la Naturaleza.
Esta situación de ausencia total de registros sugiere que la especie está extinta en la naturaleza, por lo que el trabajo que desarrollan parques de animales como BIOPARC Fuengirola es esencial para conservar y proteger a estas emblemáticas aves.
El desarrollo de este proyecto en el que colaboran diferentes entidades como Viet Nature, la World Pheasant Association, los parques zoológicos pertenecientes a la EAZA, algunos criadores privados, así como el propio Gobierno de Vietnam, ponen de manifiesto la importantísima función actual de los parques de conservación de animales como BIOPARC, con el fin de garantizar la continuidad de una población sana y genéticamente diversa de faisanes de Edwards que permitirá una reintroducción de esta especie en su medio natural original.
Desde que en 2001 recibiera la primera pareja de faisanes de Edwards, BIOPARC Fuengirola ha trabajado de forma coordinada con decenas de centros europeos pertenecientes a la EAZA para garantizar su supervivencia. Se trata de una especie muy sensible a los cambios en su hábitat. La mayor parte de los bosques donde vivían fueron destruidos durante la guerra de Vietnam. Este es uno de los principales motivos que han causado su desaparición, a los que se suman la caza y el tráfico ilegal de estos animales.
El riesgo que representa la desaparición de su entorno natural hace que centros como el de BIOPARC Fuengirola, desarrollen y participen en programas centrados en la reproducción del faisán de Edwards y, a través de la Fundación BIOPARC, en proyectos de restauración de su hábitat originario.